Motivos por los que es positivo hacer ejercicio
La gente hace ejercicio por una de estas cinco razones: por trabajo, por salud, por ocio, por competición o por su aspecto físico. La cantidad de ejercicio que se necesita depende de los motivos para hacer ejercicio, del punto de partida y de lo rápido que uno quiera alcanzar sus objetivos. Y el tipo de ejercicio que se elija depende de las capacidades y preferencias personales, del horario y de las instalaciones que tengas a tu disposición.
La actividad física regular forma parte de un estilo de vida saludable. Sin embargo, sólo uno de cada cinco adultos hace suficiente ejercicio para estar sano. Estar inactivo y demasiado tiempo sentado aumenta el riesgo de padecer cardiopatías, diabetes de tipo 2 y cáncer.
La buena noticia es que incluso pequeñas cantidades de actividad física pueden ayudar a mejorar la salud. Tanto si deseas reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas como mejorar tu calidad de vida, incorporar la actividad física regular a tu estilo de vida puede ayudarte a alcanzar tus objetivos de salud.
Además, realizar ejercicio hace que se disfrute más los momentos de relax tras hacer un esfuerzo. Por ejemplo, imagina que te sientas en el sofá a disfrutar de los juegos de Casino777 online España tras correr varios kilómetros, una sensación idónea tras haber hecho el trabajo físico que tanto cansa.
A continuación, echamos un vistazo al tiempo de ejercicio recomendable para considerar que se lleva una vida sana y saludable.
Ejercicio en el trabajo o por ocio
Para bien o para mal, no son muchas las personas del siglo XXI que cumplen sus cuotas de ejercicio en el lugar de trabajo. En la década de 1850, aproximadamente el 30% de toda la energía utilizada para la agricultura y la fabricación dependía de la fuerza muscular humana. Ya no. Hemos sustituido las azadas por tractores, las escobas por aspiradoras y las escaleras por escaleras mecánicas.
Liberadas del trabajo físico, las personas han utilizado el trabajo mental para crear una sociedad de enorme comodidad y confort. En el proceso, sin embargo, hemos creado una crisis energética oculta: no una escasez de combustibles fósiles, sino una escasez de la actividad física que el cuerpo humano necesita para protegerse de las enfermedades y desarrollar todo su potencial.
No es necesario un sistema de puntos, un reloj o un calendario. Si haces ejercicio por diversión, hazlo, siempre que satisfagas tus necesidades mínimas de salud. Pero el valor recreativo del ejercicio trae a colación un punto relevante para los hombres trabajadores que están demasiado ocupados para hacer ejercicio.
El ejercicio es una forma estupenda de disipar el estrés y levantar el ánimo. Si tu trabajo amenaza con sobrecargar tu psique, considera la posibilidad de utilizar el ejercicio para refrescar tu mente. Para algunos, eso significará ir al gimnasio a quemar algo de estrés en la cinta o la elíptica; para otros, será un paseo o un trote al aire libre para alejarse de todo; y para otros, será un poco de estiramientos o yoga a la hora de acostarse.
Ejercicio por salud
El ejercicio es el secreto mejor guardado de la medicina preventiva. A pesar de nuestras diferencias, todos necesitamos hacer ejercicio para estar sanos. El ejercicio regular proporciona una protección esencial contra muchas de las enfermedades que asolan. ¿Qué hace falta para obtener estos beneficios? Menos de lo que imaginas.
La clave está en lo que los científicos del ejercicio denominan ejercicio isotónico: actividades que utilizan los grandes grupos musculares de forma rítmica y repetitiva sin hacer que los músculos trabajen contra una gran resistencia. Solíamos llamarlo ejercicio aeróbico porque pensábamos que tenía que ser lo bastante intenso como para elevar la frecuencia cardiaca hasta el rango aeróbico (entre el 70% y el 85% de la frecuencia cardiaca máxima).
También lo llamábamos ejercicio de resistencia porque pensábamos que debía mantenerse de forma continuada para ser beneficioso. Pero ahora sabemos que ninguna de estas creencias es cierta. De hecho, puedes obtener todos los beneficios para la salud que necesitas con un ejercicio moderado que no te haga resoplar, incluso si lo haces en pequeños tramos, siempre que sumes una actividad total suficiente.
Se le conoce como ejercicio cardiometabólico (ECM) para englobar toda una serie de actividades, desde subir las escaleras del edificio de oficinas hasta hacer fuerza en una elíptica. Todas estas actividades mejorarán tu corazón, tu metabolismo y tu salud. La clave está en hacer lo suficiente y con la frecuencia necesaria.
Por salud, los médicos deberían recetar al menos 30 minutos de ejercicio moderado o 15 minutos de ejercicio intenso al día. Combina las actividades diarias, los entrenamientos formales y la práctica deportiva para obtener el ejercicio cardiometabólico que necesitas para tu salud. Y para obtener mejores resultados, haz algunos estiramientos casi todos los días y algo de entrenamiento de fuerza dos o tres veces por semana.
Cuanto más envejecemos, más necesitamos estas actividades complementarias. Y con el paso de los años, la mayoría de nosotros también nos beneficiaremos de algunos ejercicios sencillos para mejorar el equilibrio y evitar las caídas, uno de los principales problemas de salud de las personas mayores.
Consejos para empezar a hacer ejercicio
Si hace tiempo que no haces ejercicio o padeces una enfermedad crónica, consulta a tu médico para saber qué tipo y cantidad de actividades son adecuadas para ti. Fíjate objetivos realistas. Ten en cuenta que no tienes por qué realizar 150 minutos de actividad aeróbica a la semana cuando empieces a hacer ejercicio. Fíjate un objetivo realista que puedas alcanzar y aumenta gradualmente la cantidad de tiempo que estás activo. Si necesitas saltarte algún día, no pasa nada.
Manténte activo durante breves periodos de tiempo. Caminar es una forma fácil de moverse y mejorar la salud. Si no tienes tiempo para un entrenamiento de 30 minutos, da tres paseos de 10 minutos a lo largo del día. Cualquier actividad es mejor que ninguna.
Hacer la cantidad recomendada de ejercicio a la semana no significa que tengas que ir al gimnasio. Hay muchas formas de incorporar la actividad física a tu vida cotidiana. Cualquier actividad que aumente tu ritmo cardíaco y te ayude a fortalecerte cuenta como ejercicio.